En una noche impregnada de nostalgia y significado histórico, el universo de la lucha libre fue testigo del adiós definitivo de uno de sus pilares más importantes: John Cena. El 17 veces campeón mundial cerró su legendaria trayectoria en la WWE con una última y vibrante lucha, cayendo ante Gunther en el evento especial Saturday Night’s Main Event.
El Capital One Arena de Washington, completamente abarrotado, fue el escenario de The Last Time is Now, una función diseñada para celebrar y honrar la carrera de Cena, que se extendió por más de dos décadas de entrega y pasión.
La Última Batalla de un Icono
La atmósfera era eléctrica. Cerca de veinte mil aficionados rugían al ver a John Cena enfundarse las botas por última vez para enfrentar al dominante 'General del Ring', Gunther.
Desde el campanazo inicial, el austríaco impuso su ley. Con castigos severos y poderosos lazos al cuello, Gunther castigó sin piedad al ídolo, poniendo a prueba la legendaria resistencia del veterano. Sin embargo, impulsado por el incesante "Let's Go Cena!" de la multitud, el 17 veces campeón se levantó para ejecutar su movimiento insignia, el 'Ajuste de Actitud', desatando una euforia ensordecedora.
El combate se transformó en una épica de resistencia. Ambos gladiadores soportaron castigos brutales, llevando la acción incluso a la zona de comentaristas, donde Cena, con astucia, logró que su rival impactara la mesa en inglés con un estruendo que simbolizó que la batalla aún no terminaba.
Silencio y Ovación Final
De regreso al cuadrilátero, la lucha se centró en la sumisión. A pesar de que Cena resistió una y otra vez, exhibiendo su espíritu inquebrantable, finalmente el poder y la técnica de Gunther se impusieron. El 'General del Ring' logró la rendición, dejando un silencio sepulcral que rápidamente se rompió con el estruendo de la ovación final.
Con la derrota consumada, el resultado se hizo secundario. John Cena se quedó solo en el centro del ring, recibiendo una marea de aplausos y cánticos en reconocimiento a su inmenso legado.
El homenaje no se limitó a los aficionados. Superestrellas de la talla de Cody Rhodes y CM Punk rodearon el encordado en un gesto de respeto. En el momento más emotivo, le entregaron su cinturón de campeonato, sellando el adiós de una figura que, aunque se despidió con una derrota, abandonó el ring como un campeón inmortal.
COMENTA ESTA NOTA