El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó una orden ejecutiva que establece el regreso a la Luna, la creación de una base lunar, así como la preparación de una misión a Marte para los próximos cinco años.
Según la Casa Blanca, el decreto expone "una visión audaz para una política espacial" que garantice al país liderar el mundo en exploración espacial, seguridad y comercio.
En ese sentido, fija "el regreso de los estadounidenses a la Luna para 2028 y el establecimiento de los elementos iniciales de un puesto avanzado lunar permanente para 2030".
Además, llama a efectuar un mayor número de lanzamientos y de exploraciones comerciales, así como a "preparar el viaje a Marte, e inspirar a la próxima generación de exploradores estadounidenses".
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