La demanda que por daño moral Kate del Castillo interpuso en 2018 en contra de la entonces Procuraduría General de la República y el gobierno de Enrique Peña Nieto va lenta, pero caminando.
Hace seis años, la actriz actuó legalmente, solicitando 60 millones de dólares como indemnización, argumentando que las autoridades mexicanas habían dañado su honor y reputación, perjudicando su trabajo, tras relacionarla con el narcotraficante Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera.
Esto luego de que en 2015 se filtrara una reunión que la actriz y el capo, junto con el actor estadounidense Sean Penn, habían tenido para platicar sobre una posible biopic de Guzmán.
Entonces la PGR comenzó una investigación por posible lavado de dinero y, aunque nunca emitió cargos, si citó a Kate a declarar, quien por temor a ser detenida y ser utilizada como chivo expiatorio, decidió estar en EU por casi tres años.
“Fui dañada en mi honor y reputación; perjudicaron mis actividades profesionales y no podía volver a mi país por miedo a ser detenida por el Gobierno de México”, dijo en diciembre de 2018, a su llegada a México, con un nuevo sexenio y partido en el poder.
Las consecuencias Cuestionada al respecto, la actriz de Ingobernable asegura que todo va marchando bien. “En este mundo, sobre todo cuando tiene que ver con el gobierno, es muy burocrático y se tarda mucho tiempo, pero ahí va, poco a poquito”, subraya Kate.
El próximo año se cumplirá la década en que decidió irse a EU, en lo que se aclaraban las cosas. “Todavía hay consecuencias y las tendré toda mi vida, como que cuando algo pase (del Chapo) se diga mi nombre, se me relacione “Fue una decisión que yo tomé, a mí nadie me forzó a ver al señor y no me arrepiento para nada. Las traiciones (de Penn, quien filtró la información) que todos saben, ya no estuvieron en mis manos, pero estoy aquí, vivo para contarlo y estoy más fuerte que nunca”, agrega.
En un encuentro con la prensa durante el rodaje de un cortometraje que dirigió, Kate fue cuestionada sobre la política actual y fue contundente, recordando la marcha de la Generación Z. “Ya no sabes para dónde voltear, tanto en México como en EU, estamos supermal. Pienso que las marchas están muy bien, que debemos levantar la voz, ojalá sirvan”.
COMENTA ESTA NOTA